Hay muchas veces que uno por más ganas que le ponga, llega un punto en el que tiene un poco menos de paciencia.
Y son justo esos casos cuando mi hijo de 5 años tiene sus actos de rebeldía.
Es en ese exacto momento en que le digo: “¡no hagas eso!” y adivinen qué es lo que hace.
Exacto. Lo que le pedí que no hiciera.
Esa acción suele conocerse en varios ámbitos como el efecto Bárbara.
Sí, por Bárbara Streisand.
El efecto Streisand es un intento de censurar información pero que posee la consecuencia no deseada de aumentar la conciencia sobre esa información.
Esto surgió cuando Bárbara Streisand intentó suprimir legalmente una imagen pública de su hogar en la costa de Malibú, lo que sin darse cuenta amplió el alcance de la foto.
Esta foto pertenecía al Proyecto de Registros Costeros de California. La foto fue tomada para mostrar la erosión de la costa Californiana a lo largo del tiempo.
Cuando la foto se hizo pública, la señora Streisand intentó eliminar la foto del registro. Ese intento de censurar información del proyecto ocasionó que sin querer aumentara el conocimiento de la foto.
El efecto Bárbara es un ejemplo de la reactancia psicológica: una vez que las personas se dan cuenta de que se les está ocultando cierta información, estas personas se vuelven significativamente más motivadas para acceder y difundir esa información psicológica.
A pesar de que “Efecto Streisand” suena mejor que “Reactancia Psicológica”, acciones similares se vieron antes a lo largo del tiempo.
Si son melómanos, reconocerán fácilmente este sello.
Esta etiqueta hizo que toda una generación de niños fuera 100 veces más propensa a comprar un álbum de música desde los ´80.
La etiqueta fue introducida por la Industria de Grabación Americana (RIAA en inglés), para alertar a los padres que el contenido de cada disco que tenga esa etiqueta en su portada contenía insultos, blasfemias o referencias indebidas.
¿Qué sucedió luego de esto?
Montones de adolescentes comprando discos con estas etiquetas “sólo porque el disco venía con ella.”
Hay otros ejemplos más recientes, como el caso de Tesla:
En 2014, Tesla ya había causado sensación con el Model S. Para ese entonces el Model X estaba en desarrollo.
Para su tercer automóvil, Musk quería nombrar el modelo de automóvil E.
Entonces, los 3 modelos darían la sigla S-E-X.
Pero Ford ya tenía registrada la marca para el Model E, que rendía homenaje al primer automóvil de producción en masa que lo cambió todo, el Modelo T.
Así que Ford llamó a Musk y lo amenazó con demandar por uso de ese nombre.
Seamos sinceros, es muuuy probable que Musk ya supiera que la marca ya estaba registrada.
Pero Elon pasó a la ofensiva y empezó a decir que “Ford estaba matando al sexo” (la nota de Forbes de arriba, exacto).
De esa forma, Musk ganó un montón de publicidad gratuita para Tesla. Al afirmar que Ford estaba tratando de matar el "sexo", creó intriga y conciencia de marca para Tesla.
Y cuando llegó el momento de lanzar su nuevo modelo, Musk nombró al auto Model 3: S-3-X.
😉
Otro ejemplo puede ser la protesta de los taxistas de Uber en Londres que provocó un aumento del 900 % en las descargas de aplicaciones en comparación con la semana anterior en 2014.
Varias empresas utilizaron esta estrategia para generar atención a sus productos. Algunas con mayor éxito que otras, pero piensen en sus proyectos o emprendimientos ¿cómo podrían implementarla?
Recuerden que siempre hay un camino si lo piensan profundamente.
Por mi parte, intentare recordar este principio atemporal:
La mejor manera de hacer que un niño haga algo es decirle que no puede hacerlo.
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Emma